Como introducción una noticia interesante, la fotosíntesis como batería, artículo científico https://pubs.rsc.org/en/content/articlelanding/2022/EE/D2EE00233G.
Según el IPCC en su último informe (aquí pueden descargar
el informe completo, el técnico
y el resumen para trazar
políticas), tenemos hasta
2025
para empezar a reducir drásticamente las emisiones de gases de
efecto invernadero en especial el CO2.
¿Podemos modificar
todo el sistema basado en combustibles fósiles en una década?
significa cambiar el modelo de fabricación de elementos esenciales
que conllevan una infraestructura a escala global: transporte y
energía.
Creo que una
transformación rápida es imposible
en 3 años, del sistema de abastecimiento del transporte
internacional y de la producción de energía.
También es verdad
que en conferencias he visto que se habla de reducir un 80% las
emisiones de los transportes.
Si el plan es la
descarbonización de la energía y el transporte, entonces una
solución local, o más bien regional son los biocombustibles
fabricados a partir de microalgas. No a partir de alimentos en
tierras de cultivo. Los alimentos son para las personas no para los
coches. Hablo de cultivos de microalgas donde estas capturan CO2
atmosférico y fabrican moléculas orgánicas, hablo de secuestrar
carbono atmosférico en fábricas que podrían ser de grandes como
fábricas de cerveza, por poner un ejemplo.
Si fabricamos
biogasolina o biodiésel (preferiblemente gasolina porque el
diésel es mucho más sucio, expulsa mucha más cantidad de
óxidos
de nitrógeno y partículas sólidas
que nos dañan los pulmones)
en cierta cantidad para abastecer las gasolineras de medio país, ya
estaríamos reduciendo a la mitad las emisiones de GEI del transporte
de dicho país. Si la solución pasa por depender cada vez menos
de los combustibles fósiles, esta es una solución.
Si la producción es
regional e incluso nacional,
no se necesitan grandes petroleros para distribuir el combustible.
El proceso es que
las microalgas extraen carbono de la atmósfera y así reducen la
concentración de carbono en la misma, luego la mayor parte será
devuelto a la atmósfera en la combustión, pero no todo. Lo
importante es que un sistema autónomo de producción de este
biocombustible eliminará las emisiones futuras de los fósiles, no
se extraerán del subsuelo y se reducirán las emisiones.
Estas fábricas
elaboran combustible, por tanto una vez tengan cierta producción se
podrán desconectar de la red eléctrica y funcionar con generadores
abastecidos por ellos mismos, precio de fábrica.
Según zonas
geográficas podrán funcionar sin calefacción o sin aire
acondicionado, y con luz natural, o no, la mayor parte del año. La
temperatura no tiene porqué ser un gran problema pues hay microalgas
cuyo rango óptimo de temperatura es 4-10 Cº y hay otras especies
cuyo rango es 20-25 Cº. Hay un amplio abanico de posibilidades.
Las ventajas del
cultivo de microalgas también se encuentran en los residuos, en
algunos casos son residuos biológicos que se pueden compostar, y
hasta extraer biogas
(Gárate Osuna 2020).
Se pueden usar aguas
residuales, e incluso vinaza
(Rodríguez 2017).
artículos
científicos. Y otro de propina: http://www.scielo.org.mx/pdf/hbio/v27n3/0188-8897-hbio-27-03-337.pdf
Un estudio del
ICTA de la UAB y el ICM-CSIC aseguraba
en 2013 que era rentable.
Si los cultivos son
rentables,
¿por qué nadie ha invertido 100 millones, por decir una cifra?
Con 100 millones se
pueden hacer decenas de cultivos de microalgas con diferentes
especies, diferentes condiciones de crecimiento y diferentes
refinados.
Me parece hasta
barato, porque una vez se empiece a comercializar es venta segura.
Claro, que soy un
idealista, esto no interesa a quien maneja el mundo. No
interesa a la industria petrolera, ni a los países productores
(OPEP) ni a la industria del automóvil que van de la mano.
En
los informes del IPCC de abril de 2022,
muy actuales, de los que he
hablado al principio, no
aparecen
las
palabras
microalgae
ni micro-algae
(los informes están en inglés) en el cuerpo del texto del informe
completo, sólo en referencias (5
referencias científicas, 2 son de biocombustibles y 3
de microalgas como
alimentos).
En los informes resumidos, el
técnico y el sumario
para políticos, no aparecen
ni en referencias científicas, cero
referencias. Es
obvio que no tienen mucho interés.
Recuerden: para
2025 no van a conseguir disminuir los GEIs, así que, si todo
sigue igual, se implantará la Geoingeniería
(Dagon
y Schrag, 2019), y
especulo que se empezará a hablar seriamente de geoingeniería en
2024, al menos un año antes del límite impuesto por el IPCC. Como
es totalmente imposible que se reduzcan las emisiones contaminantes
para esa fecha tan cercana: geoingeniería
será la palabra de moda, secuestro de carbono o modificación
solar, principalmente la solar… Y al igual que las vacunas covid
han sido su solución tecnológica al estado de miedo sanitario, la
geoingeniería será su solución al exagerado calentamiento global
(sí, exagerado cuanto menos, si
quieren datos científicos aquí).
Pablo AC
Cotylorhiza tuberculata, medusa con algas simbiontes en su interior, para algunos es cosa de magia.